Domingo semderismo a Cruz de la Atalaya en el Padul 9 enero 2010
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Senderismo para los domingos
Senderismo para los domingos
Otras opción a esta es las fuentes y manantiales de la laguna de El Padul,
Para el próximo domingo podemos ir a la Cruz de la Atalaya, en el Padul. Esta parte del urbanización de El Puntal. .
La ruta comienza en un sendero situado junto a un depósito de agua y una instalación eléctrica.
Llevar agua, gorra, frutos secos, plátanos comida gorra o sombrero y buen humor.
El Apdul está 20 km, ida y vuelta son 40 km. A los conductores le aportados 4 euros para gasolina los que no conducimos, esto al montarnos en el coche. Y los coches deben ir llenos de gente.
Salimos a las diez y cuarto y unos 15 minutos de cortesía de espera. La puntualidad es virtud de reyes. Ir desayunados, que luego se distorsiona mucho el tomar un café o tostada y puede haber gente que se quede retrasada.
Trataremos de llevar cintas rojas o folios rojos para indicar el camino. Se recomieda imprimir los mapas o alguno de ellos al menos
Segun guia Michelin pulsa aquí para llegar
o
Seguimos este itinerario desde su inicio unas dos horas hasta que se decide descansar y almorzar.
Salimos desde el Puntal
Para saber como llegar desde gasolinera de Neptuno (callle Neptuno, Granada) a El Puntal del Padul pulsa aquí y verás el mapa
o copia y pega en tu barra de direcciones esta
o
Para saber del El Manar, refugio botanico
http://www.elpadul.es/medio/manar.htm
Por las entrañas de El Manar
Por las entrañas de El Manar
Senderismo de la Alpujarra y Valle de Lecrin
La Sierra de El Manar, en Padul, posee numerosos miradores privilegiados sobre Sierra Nevada y el Valle de Lecrín. Uno de ellos es la Cruz de la Atalaya, un balcón sobre el municipio y todo su entorno. Durante la excursión se vadean algunos refugios para pastores que contienen viejas almohadas y mantas. Pendientes escarpadas, piedras esparcidas por el sendero y algún zorro tímido son otros alicientes del itinerario.
A TENER EN CUENTA:
- Cómo llegar: Salir de la autovía a Motril en el desvío Padul-Otívar, tomando dirección Padul. Desde allí se llega a la N-323 hasta llegar a la Urbanización Valle del Puntal. La ruta comienza en un sendero situado junto a un depósito de agua y una instalación eléctrica.
- Información: Desde allí se puede ir a la Silleta de Padul (cuatro horas) o la Cruz de la Atalaya (45 minutos).
- Consejo: Comenzar la ruta a primera hora de la mañana. A partir de las 12 del mediodía, los senderos de la Sierra de El Manar sólo son transitados por las chicharras, que ponen su monótona banda sonora a la excursión.
- Cómo llegar: Salir de la autovía a Motril en el desvío Padul-Otívar, tomando dirección Padul. Desde allí se llega a la N-323 hasta llegar a la Urbanización Valle del Puntal. La ruta comienza en un sendero situado junto a un depósito de agua y una instalación eléctrica.
- Información: Desde allí se puede ir a la Silleta de Padul (cuatro horas) o la Cruz de la Atalaya (45 minutos).
- Consejo: Comenzar la ruta a primera hora de la mañana. A partir de las 12 del mediodía, los senderos de la Sierra de El Manar sólo son transitados por las chicharras, que ponen su monótona banda sonora a la excursión.
La ruta comienza en la urbanización Valle del Puntal, junto a un depósito de agua que casi roza con la sierra. Allí se comienza a bordear el Barranco de las Rajas, el antiguo curso de un río que horadó en su tiempo las rocas con 'cabezonería'. Primeros pasos y primeras rampas, terreno que predomina en el primer tramo de la excursión. Para no perderse es conveniente ir mirando el suelo: cada cierto tiempo, una cruz pintada en una piedra testimonian que el viajero sigue el rumbo correcto.
El camino entra dentro del barranco, lo cruza y continúa internándose en él tras una pequeña subida. Pasado un tiempo se llega a una bifurcación: el camino de la izquierda cruza el barranco y el de la derecha sube. Se toma el de la izquierda y se continúa una ascensión en la que, por momentos, se echará en falta un bastón por la tierra resbaladiza que predomina en algunas partes.
Después de unos quince minutos de trayecto, una cruz pintada en la roca señala el desvío a la derecha que conduce a la Cruz de la Atalaya.
Otra opción es continuar la vereda y dirigir los pasos hacia la Silleta de Padul. A falta de cruces pintadas en las piedras, señal inequívoca de llevar el rumbo correcto será toparse con un pino de cinco troncos, famoso entre todos los senderistas que se adentran en aquellos parajes. Más adelante llega el Puerto de las Calaveras, lugar desde el que se llegará a una pista forestal. Se toma hacia la derecha hasta encontrar un abrevadero, donde la pista se bifurca en dos, tomando ahora la pista a la izquierda. Continuando la subida el caminante topará con una casa blanca. De nuevo el camino hacia la derecha con la Silleta de Padul a la vista. Cuando llegue allí, el caminante estará a 1.524 metros de altitud y tendrá a sus pies la Sierra de El Manar. Entre ida y vuelta se pueden emplear cuatro horas.
Al mismo lugar se puede llegar por otro camino y mediante otro medio de locomoción: el coche. En la Nacional 323, junto a Prefabricados La Romera, comienza un carril que se adentra en la Sierra del Manar. De tomarse esta opción, si el automóvil tiene aire acondicionado, el consejo de comenzar temprano la ruta puede obviarse. Esta ruta no plantea problemas de orientación y basta con seguir el cómodo y normalmente ancho carril.
La tercera opción, la Cruz de la Atalaya, es la ruta más cómoda y ofrece unas privilegiadas vistas sobre el Valle de Lecrín. Aquí, la pendiente se suaviza y el tomillo y el romero que se desparraman por las praderas supone alimento y aliño al mismo tiempo para los conejos que en buen número pululan por allí.
Con más orden circulan las cabras que dejan huella de su presencia en el suelo y posteriormente en las suelas de los zapatos de los caminantes. De hecho, durante la excursión se vadean algunos refugios para pastores que contienen viejas almohadas y mantas. Más fauna: algunos zorros tímidos que se pierden entre la maleza al otear al visitante.
Después de unos 45 minutos de ascensión se llega a la Cruz de la Atalaya. Allí se comprueba que el nombre del mirador no es baladí. Una gran cruz recibe al caminante desde su privilegiada atalaya. La excursión ha alcanzado su destino final y es el momento de recrearse con las privilegiadas vistas que ofrece el mirador. El Valle de Lecrín parece una miniatura y las aguas de la Laguna de Padul reverberan por momentos. Es un terreno salpicado de pequeñas lagunas y numerosos manantiales que vierten sus aguas a unos canales de drenaje, denominados localmente 'madres'. En la actualidad, a pesar de haberse reducido considerablemente la superficie encharcada, la importancia de este humedal es grande, al ser el único natural de la provincia de Granada y lugar de asentamiento de numerosas aves. Se encuentran censadas hasta 75 especies distintas incluidas las que lo utilizan como descansadero en sus migraciones. Entre las especies que lo habitan todo el año hay fochas, gallinetas, garzas reales y garcillas. Y todo ello a vista de pájaro desde la Cruz de la Atalaya.
ALA DELTA
Un paraíso para los pájaros con alas de tela
La Sierra de El Manar pertenece al Parque Natural de Sierra Nevada y posee diferentes espacios de características muy favorables para el ejercicio del parapente y el ala delta. Se accede desde la N-323 a la altura de Prefabricados La Romera. El desnivel es de 1.000 metros y el despegue y el aterrizaje no presentan problemas siempre que no se aproximen demasiado a la ladera durante el vuelo –es necesario tomar más precauciones ya que en la cara sur discurre la autovía Granada-Motril–.
Un paraíso para los pájaros con alas de tela
La Sierra de El Manar pertenece al Parque Natural de Sierra Nevada y posee diferentes espacios de características muy favorables para el ejercicio del parapente y el ala delta. Se accede desde la N-323 a la altura de Prefabricados La Romera. El desnivel es de 1.000 metros y el despegue y el aterrizaje no presentan problemas siempre que no se aproximen demasiado a la ladera durante el vuelo –es necesario tomar más precauciones ya que en la cara sur discurre la autovía Granada-Motril–.
En la zona de las Turberas de Padul hay diferentes pistas de aterrizaje convenientemente señalizadas para los amantes del parapente. En verano, además de las aves típicas de la zona, suelen animar los cielos de El Manar estos pájaros con alas de tela.
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"El Padul", "Cruz de la Atalaya", senderismo, excursiuones, "grupo de amigos", amistad, esfuerzo, sacrificio, alegria, humor, "buen humor", positivo, puntualidad
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